Indulgencia
La indulgencia se gana.
La indulgencia no se ruega ni se peregrina.
Se gana con los actos, no es un estado mental ni se promueve por el deseo.
Se actúa y se obtiene, si tiene que llegar. Asumiendo que es probable que no llegue nunca.
Somos lo que hacemos para bien y para mal, no lo que sentimos.
No te condenan por pensar ni te absuelven por sentir.
Tú actúas, y generas consecuencias, ya sea un desastre o un Universo.
Acepta lo que has generado, esto no es rencor o perdón, ni olvido ni lamento.
Nunca hubo verano del amor, ni con luces de neón, más bien una pesadilla en un parque de atracciones.
Somos mentira, porque nunca existimos.
El suelo no llegó a ser acogedor, y siempre más a ti que a mi.
Cuando algo se descongela, no se puede volver a congelar.
La noche verde será un bonito recuerdo.
Sin disturbios, solo paz.
Abandono todo ápice de culpabilidad desde ya.
Buenas noches, buena suerte, buena vida.
PD: me mataste en un avión.